El preconcurso tras la última reforma de la ley concursal: El papel del plan de reestructuración

Definición del Preconcurso

El Preconcurso es una figura legal que permite a un deudor en dificultades financieras comunicar al juzgado su intención de iniciar negociaciones con sus acreedores para alcanzar un Plan de Reestructuración. Este mecanismo ofrece a la empresa un marco temporal de protección legal mientras busca soluciones viables para su situación financiera. De este modo, podemos observar que el objetivo de alcanzar un Plan de Reestructuración se constituye en uno de los objetivos mismos del Preconcurso.

Requisitos para Acogerse al Preconcurso

La Ley Concursal establece tres situaciones en las que una empresa puede acogerse al preconcurso:

Probabilidad de Insolvencia: Cuando es objetivamente previsible que, sin un Plan de Reestructuración, la empresa no podrá cumplir regularmente con sus obligaciones que vencen en los próximos dos años.

Insolvencia Inminente: Cuando el deudor prevé que no podrá cumplir puntualmente con sus obligaciones en los próximos tres meses.

Insolvencia Actual: Cuando la empresa no puede cumplir regularmente con sus obligaciones exigibles.

Es fundamental que la empresa identifique correctamente su situación financiera para aprovechar oportunamente los beneficios del Preconcurso y cumplir con los requisitos legales establecidos.

El Plan de Reestructuración: Un Elemento Clave

El Plan de Reestructuración es ahora, tras las últimas reformas, un componente central del Preconcurso. Este plan debe incluir un análisis detallado de la situación financiera de la empresa, las medidas propuestas para reestructurar las deudas y las proyecciones financieras que demuestren la viabilidad del plan. Además, debe contemplar las medidas de consulta e información a los trabajadores, así como el cumplimiento de las obligaciones fiscales y de seguridad social.

Procedimiento de Comunicación de Apertura de Negociaciones

Para iniciar el Preconcurso, el deudor debe comunicar al juzgado competente su intención de abrir negociaciones con sus acreedores, incluyendo el Plan de Reestructuración. La empresa dispone de un plazo de tres meses para negociar con sus acreedores, con la posibilidad de una prórroga de un mes adicional bajo ciertas condiciones.

Efectos de la Comunicación del Preconcurso

La comunicación de apertura de negociaciones genera una serie de efectos legales diseñados para proteger al deudor y facilitar la preparación del plan de reestructuración:

Suspensión de Ejecuciones Singulares: Durante el periodo de negociaciones, los acreedores no pueden iniciar ejecuciones judiciales o extrajudiciales sobre los bienes y derechos necesarios para la continuidad de la actividad empresarial. Las ejecuciones ya iniciadas sobre dichos bienes quedan suspendidas automáticamente.

Protección de Bienes Esenciales: Los bienes y derechos indispensables para la empresa están protegidos, evitando que acciones individuales de los acreedores puedan afectar la operatividad del negocio.

Continuidad de los Contratos: Los contratos con obligaciones recíprocas pendientes de cumplimiento no pueden ser suspendidos, modificados o terminados anticipadamente por el mero hecho de la comunicación de inicio de negociaciones.

Confidencialidad: La ley permite que el preconcurso se desarrolle de manera confidencial, evitando posibles repercusiones negativas en la reputación de la empresa.

El Plan de Reestructuración: Un Elemento Clave

Como venimos comentando el Plan de Reestructuración es ahora un componente central y esencial del Preconcurso. Este Plan debe incluir:

Análisis de la Situación Financiera: Un diagnóstico exhaustivo de la situación económica de la empresa, identificando las causas de sus dificultades y los principales desafíos que enfrenta.

Medidas de Reestructuración Propuestas: Detalle de las acciones operativas y financieras que se implementarán para restablecer la viabilidad de la empresa. Esto puede incluir la reestructuración de deudas, ajustes operativos, y cambios en la gestión o en la estructura organizativa.

Proyecciones Financieras: Estimaciones de flujos de caja y proyecciones financieras que demuestren la viabilidad del plan a corto y medio plazo.

Consulta e Información a los Trabajadores: Medidas de información y consulta con los trabajadores, conforme a la legislación laboral aplicable, asegurando que estén informados sobre el impacto del plan en sus condiciones laborales.

Cumplimiento de Obligaciones Fiscales y de Seguridad Social: Acreditación de estar al día con las obligaciones tributarias y de la Seguridad Social, lo cual es crucial si el plan afecta al crédito público.

Obligaciones del Deudor Durante el Preconcurso

El deudor debe actuar de buena fe y con transparencia, proporcionando información veraz y completa a sus acreedores y al juzgado, manteniendo una actitud colaborativa durante todo el proceso. Se espera que la empresa continúe operando normalmente, preservando el valor del negocio y evitando acciones que puedan perjudicar a los acreedores. Además, es crucial respetar los plazos y requisitos estipulados por la ley para evitar posibles sanciones o la pérdida de los beneficios del preconcurso.

Ventajas del Preconcurso

El Preconcurso ofrece tiempo para reestructurar, permitiendo a la empresa ganar un período de protección legal para reorganizar sus finanzas, elaborar un plan de viabilidad y negociar con los acreedores. Al alcanzar acuerdos durante el Preconcurso, se puede evitar un procedimiento concursal, que suele ser más complejo, costoso y con mayores implicaciones para la continuidad del negocio. Además, se suspenden las acciones individuales de los acreedores, evitando embargos y ejecuciones que podrían afectar la operatividad de la empresa. Al manejar la situación de manera confidencial y proactiva, es más probable mantener la confianza de proveedores, clientes y otros socios comerciales.

Obligatoriedad de solicitar un Concurso de Acreedores en caso de no aprobarse un Plan de Reestructuración

La Ley Concursal establece que, si tras tres meses de negociaciones preconcursales el deudor no ha alcanzado un Plan de Reestructuración, está obligado a solicitar la declaración de concurso en el mes siguiente, salvo que no se encuentre en estado de insolvencia actual.

Esta normativa busca asegurar que las situaciones de insolvencia se gestionen de manera ordenada, permitiendo que las empresas intenten primero una reestructuración con sus acreedores antes de recurrir al procedimiento concursal formal.

El incumplimiento de esta obligación puede tener graves consecuencias, incluyendo la calificación del concurso como culpable, lo que podría implicar responsabilidades personales para los administradores. Por ello, es crucial que los deudores actúen con diligencia en este proceso, utilizando el tiempo de negociación preconcursal para intentar acuerdos que eviten el concurso y, si no es posible, cumpliendo con la obligación de instar el concurso para proteger los intereses de la empresa y sus acreedores.

Conclusión

Es esencial actuar con anticipación y no esperar a que la situación financiera se deteriore más. Iniciar el preconcurso a tiempo aumenta las posibilidades de éxito en las negociaciones. Dada la complejidad y las implicaciones legales del preconcurso, contar con un equipo de abogados expertos en derecho concursal es fundamental para orientar adecuadamente el proceso. El plan de reestructuración debe ser realista y adaptado a las particularidades de la empresa, contemplando medidas concretas para restablecer su equilibrio financiero.

Desde el de , estamos comprometidos con el éxito de su empresa. Si se encuentra en una situación de probabilidad de insolvencia o enfrenta dificultades para cumplir con sus obligaciones, no dude en . Nuestro equipo de expertos está preparado para ofrecerle el apoyo legal necesario, acompañándole en cada paso hacia la recuperación y la continuidad de su negocio. 

 


Otras publicaciones